NADAL VS RUUD
A sus 36 años Rafa Nadal sigue mostrándose inexpugnable en París y este domingo buscará su 14 título en estas pistas. Es una cifra absolutamente descomunal y que difícilmente será igualable. Además si logra el título sumaría su 22 Grand Slam por lo que empezaría a destacarse de sus perseguidores Novak Djokovic y Roger Federer.
Esta será la final de Grand Slam número 30 para el español y no tengo ninguna duda que esta es la más meritoria. Cuando finalice el torneo Rafa dará todos los detalles del estado en el que ha saltado a competir en cada ronda para no tener que renunciar a esta cita. El estado del pie de Nadal es muy preocupante ya que su lesión crónica le obliga a saltar infiltrado a cada partido, a adaptar sus entrenamientos y a terminar absolutamente cojo cuando los tratamientos dejan de hacerle efecto.
Evidentemente que así no se puede competir por lo que por el bien del propio cuerpo de Nadal el español comunicará que se aparta un tiempo indeterminado del circuito cuando finalice esta final. Ello no significa que se retire pero si que muy probablemente tardaremos a poder volver a disfrutar con él sobre la pista y veremos en que condiciones vuelve y si es más a modo de despedida que para ser competitivo.
Por lo tanto para esta final la prioridad es disfrutar del que quizás podría ser el último gran partido de Rafa con un Grand Slam en juego. Su rival será un gran conocido para el español. No se han enfrentado nunca a nivel oficial pero si que han compartido múltiples horas de entrenamiento ya que Casper Ruud se ha formado en la Rafa Nadal Academy y ha sido el sparring de Rafa en muchas prácticas.
El noruego sin hacer ningún tipo de ruido ha accedido a su primera final de Grand Slam y con ello por primera vez entrará en el top 4 del ránking mundial. Era un auténtico especialista de las citas menores sobre tierra batida pero aquí en París se ha encontrado con un cuadro que ni él mismo podría haber diseñado más asequible ya que ha accedido a la final sin enfrentarse a ningún top 10. Estar aquí ya era algo impensable para él por lo que disputa esta final es un premio. Además lo hará contra su gran ídolo por lo que poco más puede pedir.
Evidentemente que Rafa es el gran favorito para esta final. No sólo porque es el mejor terrícola de toda la historia, sino porque en las grandes ocasiones es cuando muestra su mejor versión. En cambio Ruud se estrenará en una final de Grand Slam y además lo hará contra su gran ídolo y ello siempre genera un plus de nervios añadidos.
Por primera vez en muchos años Rafa llegó a esta edición de Roland Garros sin partir como favorito. La imagen que había dejado en Roma era muy preocupante y había muchas dudas de como se comportaría su pie. Pero la infiltración ha funcionado a la perfección y no hemos visto al balear con ningún tipo de molestia. Sufrió para derrotar en 5 sets a un gran Felix Auger y partiendo como claro no favorito dio una auténtica exhibición ante Novak Djokovic. Precisamente en las semifinales ha sido cuando ha completado su peor partido de toda la semana. Podemos decir claramente que Alexander Zverev ha sido superior a Rafa, ha merecido ir por delante en el marcador pero como suele ser habitual en el alemán no ha tolerado la presión en los momentos decisivos. En el primer set Zverev ha tenido break de ventaja e incluso un 6-2 en el tie break pero Rafa no se ha rendido y en esas situaciones límite ha mostrado su mejor versión lo que ha provocado el hundimiento del alemán. Posteriormente el segundo set ha sido un absoluto bochorno, en el que ambos tenistas se han sentido muy incómodos con las condiciones de humedad extrema de la pista. Hemos tenido 8 roturas de servicio, Zverev nuevamente ha dejado escapar un 5-3 a favor y parecía que estábamos ante un partido que iba a batir récords de duración. Aún tenía que disputarse el tie break del segundo set y ya se superaban las 3 horas de partido. Pero justo ahí, ha llegado la lastimosa acción en la que Zverev se ha doblado el tobillo de forma muy grave hasta tal punto que ha tenido que abandonar la pista en silla de ruedas. En esta ocasión Rafa se ha visto favorecido por ello ya que el alemán estaba siendo superior y no las tenía ni mucho menos todas de quien se llevaría la victoria. Además de haber ganado el desgaste de Rafa habría sido brutal.
Por su parte es muy meritorio que un luchador y trabajado como Casper Ruud haya accedido a la final pero si lo ha logrado ha sido claramente por el cuadro tan favorable que ha tenido. Y aún así las dificultades han sido máximas. Tsonga y Sonego le llevaron completamente al límite y posteriormente ha superado a Holger Rune y a Marin Cilic gracias a su mayor regularidad. Durante muchos momentos de estos dos últimos partidos ha sido inferior, pero ha sabido esperar muy pacientemente que llegara el momento en el que sus oponentes bajaran el nivel para sentenciarles.
Pero ahora esta táctica ante Nadal no debería funcionarle. Ruud no puede estar esperando constantemente los errores del balear para sumar los puntos por lo que deberá tomar riesgos y ello no es lo habitual en él.
Considero que Rafa es el gran favorito pero su cuota es completamente ridícula y mucho más con estas dudas que todos sabemos que tiene en el pie.
Esperemos que Nadal pueda certificar su excepcional actuación y de esta forma sume un nuevo título que aún le haga más grande.
A partir de ahí tocará esperar que le puedan encontrar algún tipo de tratamiento para aligerar sus problemas y que le podamos tener de vuelta lo más pronto posible.
Juega con responsabilidad y solo si eres mayor de 18 años.
